España a cuartos de final

La fuerza defensiva de Portugal no logró contener a una furia roja decidida a demostrar que los pronósticos no se equivocan al ponerla de favorita en Sudáfrica 2010.

Cape Town fue la sede para la disputa del último boleto a cuartos de final del mundial 2010.

Desde el incio del juego España se volcó al frente y las primeras aproximaciones de verdadero peligro fueron por parte de la furia roja.

Los disparos a la portería de Eduardo, arquero de Portugal, le avisaron que la poderosa delantera de España no lo dejaría en paz. Fernando Torres y David Villa buscaron tener suerte con fuertes disparos.

Fueron varias las llegadas españolas sin que Portugal apareciera sobre el terreno de juego. España comenzó a abrir la cancha buscando desbordar por las bandas, cosa que en sus últimos encuentros no había conseguido.

Los minutos pasaron y poco a poco los portugueses entraron al partido, quizá apostando más al contrataque y con un juego más defensivo, Cristiano Ronaldo fue el primero en probar al portero español con un potente disparo fuera del área.

El toque y la velocidad de Portugal equilibraron el partido, el encuentro logró verse un poco más parejo. La posesión y control del balón se dio por parte de la furia roja pero sin llegar a desequilibrar.

Los primeros 45 minutos de juego nos dieron un 0 a 0 y algunas jugadas importantes por ambas escuadras. Al final se pudo ver un tanto de desesperación por parte de España quien abusó un poco de disparos de larga distancia.

Para el segundo tiempo ambas escuadras regresaron con su mismo planteamiento, sólo había una pregunta en el aire: ¿Portugal seguiría apostando por contragolpes? o ¿España arriesgaría más al frente pese a la violencia del rival?

España continuó fiel a su juego, tuvo la pelota y algunos disparos a gol apenas comenzando el segundo tiempo, sin embargo Portugal gracias a sus contragolpes fue quien estuvo más cerca del gol.

Los cambios no se hicieron esperar, Llorente entró por Fernando Torres quien pese a sus ganas no logró demostrar el juego que tanto lo ha caracterizado.

Por su parte Portugal mandó a Danny Alvez por Almeida, tratando de tener otra opción ofensiva.

La furia española siguió al frente y por fin con un extraordinario taconazo de Xabi hacia Villa, España marcó el primer tanto del partido.

La confianza y la determinación se vio reflejada en los jugadores españoles quienes lograron frenar el poco ataque portugués con toque y control de balón en media cancha.

Ronaldo nunca apareció y para muchos quedó a deber en este mundial. La poca conexión del medio campo hacia adelante fue borrando a un Portugal que no quiso o no pudo ir al frente.

España con el dominio del balón y del juego, se dedicó a tocar y controlar el partido, al frente de un equipo de Portugal sin mayores aproximaciones trató de dar alcance sin ningún éxito.

Portugal simplemente abandonó la cancha y el mundial sin dar ni proponer aún cuando se jugaban el último pase a la siguiente ronda.

Al final España pasa a cuartos demostrando que el ataque y control de balón dan a la larga la mayor de las satisfacciones producida por el triunfo.